CIENCIA Y CONOCIMIENTOS... Aprendamos sobre los misterios del universo... los invito a leerme...: agosto 2020
CIENCIA Y CONOCIMIENTOS... Aprendamos sobre los misterios del universo... los invito a leerme...
lunes, 31 de agosto de 2020
DETECTAN EN EL ESPACIO UNOS EXTRAÑOS OBJETOS NUNCA ANTES VISTOS.
Se trata de unos misteriosos objetos circulares que no parecen corresponder a ningún tipo de objeto cósmico conocido, señalan los astrónomos.
Las formas circulares no son atípicas en las imágenes que nos llegan desde el espacio y suelen representar objetos esféricos, como los restos de supernovas, nebulosas planetarias, conchas circunestelares, discos protoplanetarios o las galaxias donde se forman estrellas.
Sin embargos, unos objetos redondeados descubiertos recientemente en una investigación piloto del Mapa Evolutivo del Universo —un sondeo de todo el cosmos con el uso del radiotelescopio australiano Array Pathfinder (ASKAP)— "no parecen corresponder a ninguno de estos tipos de objetos o artefactos conocidos, sino que parecen ser una nueva clase de objeto astronómico", señalaron los científicos.
El equipo internacional de astrónomos ha presentado su estudio para su publicación en la revista Nature Astronomy, pero por el momento su trabajo, disponible en el portal arXiv, no ha pasado la revisión por pares.
Los investigadores han bautizado su hallazgo como "círculos de radio extraños" y no creen que se trate de distorsiones visuales alrededor de fuentes brillantes causadas por errores de calibración o por una deconvolución inadecuada.
En total, encontraron cuatro objetos no identificados durante su análisis de las imágenes. Son visibles únicamente en longitudes de onda de radio y ninguno de ellos tiene "contrapartidas ópticas, infrarrojas o de rayos X, aunque en dos casos hay una galaxia óptica cerca del centro de emisión radioeléctrica", explican los astrónomos.
Todos están en altas latitudes galácticas, a cierta distancia del plano galáctico, y tienen alrededor de un minuto de arco de diámetro, lo cual es aproximadamente un 3 % del tamaño de la Luna en el cielo nocturno. Sin embargo, como no sabemos cuán lejos están exactamente, esa cifra puede no significar mucho.
El resplandor de los bordes en algunos de estos objetos apunta a que pueden ser esféricos, lo que a su vez sugiere una posible onda esférica de algún evento transitorio. "Recientemente, se han descubierto varias clases de eventos transitorios de este tipo capaces de producir una onda de choque esférica, tales como estallidos rápidos de radio, estallidos de rayos gamma y fusiones de estrellas de neutrones", indican los autores del estudio.
"Sin embargo, debido al gran tamaño angular de los Círculos de Radio Extraños, cualquiera de esos eventos transitorios habrían tenido lugar en un pasado lejano", razonan los astrónomos, que indican que también es posible que se trate de "una nueva categoría de un fenómeno conocido, como los chorros de una radiogalaxia o un blazar" o de los "restos de un flujo de salida de una radiogalaxia".
No obstante, en el último caso "no existen observaciones de ese fenómeno que se asemejen mucho a los Círculos de Radio Extraños en características como el resplandor de los bordes o la ausencia de un blazar visual o una radiogalaxia en el centro".
DESCUBREN QUE LAS ENANAS BLANCAS PUEDEN SER FUENTES DE CARBONO EN EL UNIVERSO.
Cúmulo globular denominado NGC 6388, el 17 de abril de 2015.NASA / Reuters
Antes de quemarse por completo, estas estrellas en la etapa final de su desarrollo emiten cenizas al espacio circundante a través de vientos estelares enriquecidos con elementos químicos, incluido el carbono.
Un nuevo análisis de las enanas blancas en la Vía Láctea y en otras galaxias ha demostrado que estos remanentes estelares pueden ser una fuente importante de carbono, un elemento esencial para la vida, según el estudio publicado en la revista Nature Astronomy.
Aproximadamente el 90 por ciento de todas las estrellas completan su desarrollo en forma de enana blanca, un remanente estelar muy denso que se enfría y atenúa gradualmente durante miles de millones de años. Según ha concluido un equipo de científicos internacionales, antes de quemarse por completo, las enanas blancas emiten sus cenizas al espacio circundante a través de vientos estelares enriquecidos con elementos químicos, incluido el carbono, recién sintetizados en el interior profundo de la estrella durante las últimas etapas antes de su muerte.
Desde 2018, los especialistas analizaron y calcularon las masas de varias enanas blancas. "Usando la teoría de la evolución estelar, pudimos remontarnos a las estrellas progenitoras y derivar sus masas al nacer", ha explicado uno de los autores del estudio, Enrico Ramirez-Ruiz. En general, cuanto más masiva es la estrella al nacer, más masiva es la enana blanca en el momento de su desaparición, tendencia que ha sido respaldada tanto por observaciones como por la teoría.
Sin embargo, el análisis de las enanas blancas recién descubiertas en viejos cúmulos abiertos también arrojó otro resultado. Según los científicos, en este caso las masas de enanas blancas analizadas fueron notablemente más grandes de lo esperado, creando una curva entre la masa inicial y final de una estrella.
"Nuestro estudio interpreta esta curva en la relación de masa inicial-final como el proceso de la síntesis de carbono hecha por estrellas de baja masa en la Vía Láctea", comenta la autora principal de la investigación, Paola Marigo. Los investigadores concluyeron que las estrellas que son dos o más veces más masivas que el Sol emitieron carbono, mientras que las estrellas de menos de una masa solar y media no lo hicieron.
En las últimas fases de su vida, las estrellas dos veces más masivas que el Sol produjeron nuevos átomos de carbono en sus interiores calientes, los transportaron a la superficie y emitieron al espacio a través de vientos estelares. Los especialistas destacaron que el proceso de extracción del manto externo rico en carbono ocurrió lentamente, lo que permitió que los núcleos de estas futuras enanas blancas crecieran en masa.
EL AGUJERO NEGRO MÁS "VORAZ" DEL UNIVERSO ENGULLE UNA MASA EQUIVALENTE AL SOL DE UN DÍA.
Su enorme 'apetito' le garantiza un crecimiento inusual de su masa y el cuásar que lo rodea también ostenta un récord de luminosidad.
En el centro del cuásar más luminoso de todos los descubiertos hasta la fecha se ubica uno de los agujeros negros más grandes conocidos y el más voraz jamás visto, estima un grupo de astrónomos de Australia, EE.UU. y el Observatorio Europeo Austral (ESO).
El agujero negro supermasivo J2157-3602, localizado en la constelación del Pez Austral, a una distancia de 12.000 millones de años luz, pesa aproximadamente 8.000 veces la masa de Sagitario A*, el agujero negro central de nuestra galaxia. El artículo del equipo, publicado esta semana en la revista Monthly Notices of the Royal Astronomical Society, señala que su masa equivale a 34.000 millones de veces la del Sol.
Los estudiosos destacan que las observaciones reflejan el estado del cuásar de cuando el universo tenía solo 1.200 millones de años (apenas el 10% de su edad actual), debido a la enorme distancia que nos separa. A partir de esa edad estimada, pudieron calcular también la tasa de crecimiento del agujero negro, la máxima conocida para aquella época, puesto que engulle a un equivalente de la masa solar (terrestre) al día.
"Cuánto pueden tragar los agujeros negros depende de la cantidad de masa que ya tengan", explica uno de los miembros del grupo investigador, Fuyan Bian, que trabajó desde el Observatorio Europeo Austral, con sede en Chile. "Entonces, para que ese objeto esté devorando materia a un ritmo tan alto, pensamos que podría convertirse en el poseedor de un nuevo récord. Y ahora lo sabemos", indica un comunicado de la Universidad Nacional de Australia.
Estas nuevas estimaciones acerca del objeto, identificado por primera vez en el año 2018, se fundamentan en una espectroscopía en infrarrojo cercano hecha por un telescopio australiano y los datos del VLT (Very Large Telescope) del ESO.
"Si el agujero negro de la Vía Láctea quisiera engordar hasta ese punto", compara el astrónomo australiano Christopher Onken, "tendría que tragarse dos tercios de todas las estrellas de nuestra galaxia".
En el caso de que el Sistema Solar sobreviviera de algún modo a esta hipotética adhesión múltiple al cuásar, los investigadores australianos calcularon que, una vez puesto en el centro de la Vía Láctea, este sería 10 veces más brillante que la Luna llena para un virtual observador terrestre. Sin embargo, en su primer estudio sobre el J2157-3602, los científicos calificaron de poco probable que hubiera podido haber vida en la Tierra en ese escenario debido a las enormes cantidades de rayos X que emanarían de él.
LOS ASTRÓNOMOS DESCUBREN POR PRIMERA VEZ EL NÚCLEO "DESNUDO" DE UN EXOPLANETA.
El descubrimiento de este objeto, más grande que Neptuno, nacido como un gigante gaseoso pero ahora desprovisto de sus capas gaseosas, ofrece una oportunidad única de mirar dentro del interior de un planeta y estudiar su composición.
Un grupo de astrónomos de la Universidad de Warwick descubrió el núcleo sobreviviente de un gigante gaseoso que orbita una estrella similar al Sol a unos 730 años luz de la Tierra. El hallazgo ofrece una visión sin precedentes del interior de un planeta, indica el comunicado de la universidad británica.
El núcleo del planeta, catalogado como TOI 849 b, es de un tamaño similar a Neptuno. Se cree que perteneció a un gigante gaseoso que fue despojado de su atmósfera gaseosa o que no logró formarla en los primeros estadios de su existencia.
El equipo del Departamento de Física de la Universidad de Warwick afirma que es la primera vez que se observa el núcleo expuesto de un planeta y señala que explicar cómo surgió ese fenómeno desafía lo que los científicos entienden sobre cómo crecen y evolucionan los planetas.
El TOI 849 b fue encontrado por el Satélite de Sondeo de Exoplanetas en Tránsito (TESS, por sus siglas en inglés), un telescopio espacial lanzado en 2018 para buscar exoplanetas.
El planeta está ubicado en el llamado 'Desierto de Neptuno', un término utilizado por los astrónomos para denominar una región cercana a las estrellas donde rara vez se ven planetas con una masa igual o superior a la de Neptuno.
El equipo determinó que la masa del objeto es entre dos y tres veces mayor que la de Neptuno y también es increíblemente densa.
El autor principal del estudio, David Armstrong, del Departamento de Física de la Universidad de Warwick, dijo: "Aunque es un planeta inusualmente masivo, está muy lejos de lo más masivo que conocemos. Pero es el más masivo que conocemos por su tamaño, y extremadamente denso para algo del tamaño de Neptuno, lo que nos dice que este planeta tiene una historia muy inusual".
Según el modelo utilizado por el equipo, la densidad del planeta sugería que debería haber sido capaz de acumular una gran cantidad de hidrógeno y helio, pero parece que solo ha reunido una fracción de lo que se esperaba, explica por su parte Christoph Mordasini, físico de la Universidad de Berna (Suiza) y coautor del estudio.
"Una cantidad tan pequeña de hidrógeno y helio es realmente sorprendente para un planeta tan masivo (...) Esperaríamos que un planeta tan masivo hubiera acumulado grandes cantidades de hidrógeno y helio cuando se formó", explicó.
Los científicos sugieren dos explicaciones posibles del surgimiento del núcleo 'desnudo' de un planeta casi desprovisto de gas, algo anormal para los gigantes gaseosos típicos, cuya masa generalmente está en forma gaseosa. La primera es que alguna vez fue similar a Júpiter, pero perdió casi todo su gas externo a raíz de varios accidentes que podrían implicar su destrucción al acercarse demasiado a su estrella, o incluso una colisión con otro planeta.
Otra explicación es que podría ser un gigante gaseoso fallido. Los científicos creen que cuando se formó el núcleo del gigante gaseoso algo 'salió mal' y nunca se formó su atmósfera, ya sea a causa de una brecha en el disco de polvo del que se formó el planeta, o porque se formó tarde y el disco se quedó sin material.
UNA "MONSTRUOSA" ESTRELLA SE DESVANECE SIN DEJAR RASTRO.
A los científicos les sorprendió que "una estrella tan masiva" y con un brillo 2,5 millones de veces más intenso que el del Sol desapareciera sin producir una gran explosión de supernova.
Con el uso del Very Large Telescope (VLT) del Observatorio Europeo del Sur (ESO), los astrónomos se han percatado de la ausencia de una misteriosa estrella masiva inestable en la galaxia enana Kinman (PHL 293B), ubicada a unos 75 millones de años luz de distancia, en la constelación de Acuario.
"Nos sorprendió descubrir que la estrella había desaparecido", dijo Andrew Allan, estudiante de doctorado del Trinity College de Dublín, Irlanda, quien lideró las observaciones.
Las observaciones anteriores mostraban que la estrella estaba en una etapa tardía de su evolución. Entre 2001 y 2011, la luz de la galaxia dio constantemente pruebas de que albergaba una estrella "variable azul luminosa" unas 2,5 millones de veces más brillante que el Sol.
El ESO publicó una animación que enseña cómo podría haber sido esa estrella variable azul luminosa de la galaxia Kinman antes de su misteriosa desaparición.
Ahora se cree que la estrella desapareció de la vista en algún momento entre 2011 y 2019 y su ausencia podría indicar que la estrella se volvió menos brillante y había quedado parcialmente oscurecida por el polvo. Al mismo tiempo, existe una explicación alternativa que apunta a que la estrella podría haber colapsado en un agujero negro sin producir una supernova.
"Si eso es cierto, esta sería la primera detección directa de una estrella monstruosa que acaba su vida de esta manera", indica Allan, autor principal del estudio, cuyos resultados fueron publicados en Monthly Notices of the Royal Astronomical Society.
"Sería muy inusual que una estrella tan masiva desapareciera sin producir una brillante explosión de supernova", agregó. De acuerdo con teorías existentes, las estrellas masivas en su mayoría terminan sus vidas en una gran explosión de una supernova. De confirmarse, el actual descubrimiento podría cambiar lo que sabemos de cómo mueren las estrellas masivas.
Imagen de la galaxia enana Kinman, también conocida como PHL 293B, tomada por el telescopio Hubble en 2011, antes de la desaparición de la estrella masiva.NASA/ESA/Hubble, J. Andrews (U. Arizona).
CIENTÍFICOS LOGRAN REPLICAR EN LA TIERRA LAS LLUVIAS DE DIAMANTES DE NEPTUNO.
Un grupo de investigadores ha demostrado en un laboratorio la teoría de que en Neptuno y Urano realmente hay precipitaciones de diamantes.
Un equipo internacional de científicos mantiene desde hace años la teoría de que lluvias de diamantes reales podrían producirse en Urano y Neptuno. Ahora esta suposición ha recibido una confirmación tras el experimento realizado por el Laboratorio Nacional de Aceleradores SLAC del Departamento de Energía de EE.UU. operado por la Universidad de Stanford, informa la página web del Laboratorio.
Ambos planetas pertenecen a los llamados gigantes de hielo, aunque en realidad la sustancia de la que están compuestos se encuentra en estado de gas líquido, sin embargo la temperatura en el núcleo alcanza varios miles de grados.
La atmósfera de Urano y Neptuno se compone principalmente de helio e hidrógeno, pero en las profundidades de estos planetas se encuentran sustancias más pesadas, como el metano. Según la hipótesis, a una profundidad de aproximadamente 7.000 km, la temperatura y la presión alcanzan un valor tan alto que el metano debe descomponerse en sus elementos constitutivos: carbono e hidrógeno.
Como resultado, el hidrógeno —más ligero— se eleva a la atmósfera, y el carbono se convierte en cristales de diamante y 'se hunde' lentamente hacia el núcleo helado de estos planetas, según un experimento ya realizado por el SLAC en 2017.
Para confirmar esta teoría, los investigadores del Laboratorio SLAC recrearon condiciones en la Tierra cercanas a las que se encuentran en las profundidades de Urano.
Los científicos de SLAC pudieron hacer este descubrimiento utilizando equipos de laboratorio únicos, pero en lugar de metano (CH4) usaron poliestireno (C8H8).
La presión de 250 elefantes africanos en una uña
En un primer paso se calentó y presurizó el material para replicar las condiciones dentro de Neptuno a una profundidad de alrededor de 10.000 kilómetros: los pulsos de láser óptico generaron ondas de choque en el poliestireno que calentaron el material hasta alrededor de 5.000 grados Kelvin (4.727 ºC), así como una presión intensa.
"Producimos alrededor de 1,5 millones de bares, lo que equivale a la presión ejercida por el peso de unos 250 elefantes africanos en la superficie de una uña del pulgar", explicó Dominik Kraus, uno de los participantes en el experimento.
Como resultado, los científicos pudieron observar cómo el carbono que contiene el poliestireno se convierte en diamantes, y el resto del compuesto se libera en forma de hidrógeno puro. Y prácticamente no quedaron restos de carbono.
"En el caso de los gigantes de hielo, ahora sabemos que el carbono forma casi exclusivamente diamantes cuando se separa y no adquiere una forma fluida de transición", explicó Kraus.
Dicho fenómeno, a su vez, confirma otra hipótesis de los científicos. El hecho es que Neptuno emite aproximadamente 2,6 veces más energía de la que recibe del Sol. Aparentemente, si los diamantes caen constantemente al núcleo del planeta, su energía gravitacional se convierte en calor debido a la fricción con otros materiales, lo que calienta el planeta.
LAS MANCHAS GIGANTES DE BETELGEUSE PUEDEN ESTAR DETRÁS DE LA ATENUACIÓN SIN PRECEDENTES DE ESTA ESTRELLA.
Un grupo de investigadores sugiere que las manchas que pueden cubrir hasta el 70 % de la superficie de la supergigante redujeron la temperatura general de la estrella, haciendo que parezca menos luminosa.
El año pasado, la estrella supergigante roja Betelgeuse empezó a experimentar una caída de brillo sin precedentes. La causa aún no ha sido determinada, pero un nuevo estudio, disponible en The Astrophysical Journal Letters, sugiere que las manchas gigantes de la estrella, ubicada a unos 650 años luz de la Tierra, fueron las culpables de esa dramática caída en su luminosidad.
Entre octubre de 2019 y abril de 2020, los científicos observaron una disminución de hasta un 40 % en el brillo normal de la estrella. Estudios anteriores explicaron que la atenuación se debía a una nube de polvo que Betelgeuse 'estornudó' y que oscureció durante un tiempo la luz de la estrella. No obstante, las nuevas observaciones ofrecen otra explicación de los hechos.
"Hacia el final de sus vidas, las estrellas se convierten en gigantes rojas. A medida que se agota el suministro de combustible, los procesos cambian, con lo cual las estrellas liberan energía. Como resultado, se hinchan, se vuelven inestables y palpitan en períodos de cientos o incluso miles de días, algo que nosotros vemos como una fluctuación en el brillo", indicó en un comunicado la autora principal del estudio, Thavisha Dharmawardena, del Instituto Max Planck de Astronomía, en Alemania.
Los investigadores usaron datos nuevos y de archivo recopilados por el Experimento Atacama Pathfinder (APEX) y el telescopio James Clerk Maxwell (JCMT), que miden la radiación en longitudes de onda submilimétricas. "Lo que nos sorprendió fue que Betelgeuse se volvió un 20 % más oscura incluso en el rango de ondas submilimétricas", dijo Steve Mairs, coautor del estudio.
Los investigadores concluyeron que este comportamiento no puede explicarse por la presencia de polvo, sino que es más probable que se trate de "una distribución asimétrica de la temperatura", ya que la luminosidad de una estrella depende de su diámetro y especialmente de la temperatura de su superficie.
Así, según los científicos, el oscurecimiento medido en la luz visible y las ondas submilimétricas puede ser evidencia de una reducción en la temperatura media de la superficie de Betelgeuse, 20 veces más masiva que el Sol y aproximadamente 1.000 veces más grande. Los datos obtenidos apuntan a la presencia en Betelgeuse de enormes manchas que cubren entre el 50 % y el 70 % de su superficie visible.
Esta es una clara indicación de enormes manchas estelares que cubren entre el 50 % y el 70 % de la superficie visible de Betelgeuse
"Las imágenes de alta resolución de Betelgeuse de diciembre de 2019 muestran áreas de brillo variable. Junto con nuestro resultado, esta es una clara indicación de enormes manchas estelares que cubren entre el 50 % y el 70 % de la superficie visible y que tienen una temperatura más baja que la fotosfera más brillante", explicó el coautor del estudio Peter Scicluna, del Observatorio Europeo Austral (ESO).
Según Dharmawardena, las observaciones de los próximos años podrán aclarar si "la fuerte disminución en el brillo de Betelgeuse está relacionada con un ciclo de las manchas". Por ejemplo, las manchas en nuestro Sol también tienen ciclos, intensificándose durante una fase de actividad intensa que ocurre cada 11 años. No obstante, hasta ahora se desconoce cómo funcionan las manchas en otras estrellas, especialmente en estrellas tan evolucionadas como Betelgeuse.
VIDEO: LA NASA PRESENTA UN IMPRESIONANTE RESUMEN DE 10 AÑOS DE OBSERVACIONES DEL SOL..
Se trata de 425 millones de imágenes en alta resolución que hicieron posibles "innumerables descubrimientos".
La NASA presentó un impresionante video de una hora de duración con el resumen de 10 años de observaciones del Sol realizadas por el Observatorio de Dinámica Solar (SDO, por sus siglas en inglés).
Se trata de más de 20 millones de 'gigabytes' de datos o 425 millones de imágenes del Sol de alta resolución, que fueron recopilados desde febrero de 2010, cuando fue lanzado el laboratorio, y muestran la evolución del estado de la corona solar o capa más externa de la estrella.
El estudio es realizado por la nave espacial, que está dando vueltas alrededor de la Tierra y realizando observaciones del Sol usando tres instrumentos diferentes. La NASA espera que su Observatorio de Dinámica Solar pueda trabajar otros 10 años.
La agencia estadounidense asegura que estos datos hicieron posibles "innumerables nuevos descubrimientos sobre el funcionamiento de nuestra estrella más cercana y cómo influye en el sistema solar".
DESCUBREN DOS SUPERTIERRAS ALREDEDOR DE UNA DE LAS ESTRELLAS MÁS CERCANAS A NUESTRO SISTEMA SOLAR.
Se cree que los planetas recién descubiertos se encuentran cerca de la zona habitable de la enana roja Gliese 887, donde el agua puede existir en forma líquida, pudiendo ser mundos rocosos.
Un equipo internacional de astrónomos dirigidos por la Universidad de Gotinga (Alemania) ha localizado un sistema formado por al menos dos supertierras que orbitan alrededor de la cercana Gliese 887, la estrella enana roja más brillante del cielo, según un estudio publicado este jueves en la revista Science.
Los científicos monitorearon la enana roja valiéndose para ello del espectrógrafo HARPS del Observatorio Europeo Austral en Chile. De esta forma, pudieron medir las pequeñas oscilaciones que provoca la atracción gravitatoria de los planetas en la estrella. En su investigación señalan que el sistema alberga al menos dos, y tal vez tres, exoplanetas de tamaño de una supertierra.
Una supertierra es un planeta con una masa mayor que la de nuestro planeta, pero menor que la de los gigantes de hielo, Urano y Neptuno. Se cree que los planetas recién descubiertos se encuentran cerca de la zona habitable de la enana roja, donde el agua puede existir en forma líquida, pudiendo ser mundos rocosos, recoge el portal Phys.org.
Los dos planetas identificados por los investigadores, Gliese 887b y Gliese 887c, tienen periodos orbitales de 9,3 y 21,8 días, respectivamente, lo que significa que se mueven mucho más rápido y más cerca que Mercurio alrededor del Sol. Además, se estima que sus temperaturas aproximadas son de 200 y 70 grados centígrados, respectivamente.
Una oportunidad para la búsqueda de vida
Situada a unos 11 años luz de distancia, Gliese 887 es una de las estrellas más cercanas a nuestro Sistema Solar. Es mucho más tenue que el Sol y tiene aproximadamente la mitad de su tamaño. Los astrónomos no descartan la posibilidad de que los planetas recién descubiertos puedan retener atmósferas o incluso que sean más densas que la de la Tierra, pudiendo potencialmente albergar vida.
Llama la atención que Gliese 887 sea relativamente inactiva en lo que se refiere a erupciones solares, que pueden ser peligrosas para la vida en los planetas cercanos. "Estos planetas proporcionarán las mejores posibilidades para estudios más detallados, incluida la búsqueda de vida fuera de nuestro sistema solar", señaló la autora principal del estudio Sandra Jeffers, astrofísica de la Universidad de Gotinga.
En caso de que futuras observaciones lleguen a confirmar la presencia de un tercer planeta en la zona habitable de la estrella, este podría convertirse en uno de los sistemas planetarios más estudiados en el vecindario de nuestro Sistema Solar. Su proximidad ofrece una prometedora oportunidad para estudiar las atmósferas de los exoplanetas usando el Telescopio Espacial James Webb, cuyo lanzamiento está programado para el 2021.
DESCUBREN UN NUEVO PLANETA DEL TAMAÑO DE NEPTUNO QUE SE ENCUENTRA EN UN SISTEMA SOLAR INUSUAL.
El hallazgo ayudará al estudio de la formación de planetas y su interacción con las estrellas, señalan los científicos.
Los datos captados por los telescopios espaciales TESS y Spitzer de la NASA permitieron a los científicos detectar un planeta que orbita la estrella cercana AU Microscopii (o AU Mic) y forma parte de un sistema solar excepcional entre todos los conocidos. Los resultados del estudio, encabezado por Peter Plavchan de la Universidad George Mason (EE.UU.), fueron publicados este miércoles en la revista Nature.
El nuevo planeta, que recibió el nombre de AU Mic b e iguala en su tamaño a Neptuno, orbita una estrella joven de tipo M, o enana roja, rodeada por un enorme disco de escombros con agrupaciones móviles de polvo. "No hay otro sistema conocido que cumpla con todos estos singulares criterios", cita la página de la NASA a Bryson Cale, coautor del estudio.
AU Mic b completa un giro alrededor de su estrella en solo 8,5 días, mientras los planetas de los planetas Beta Pictoris b y c, de la misma constelación del Microscopio, tienen un periodo orbital de 21 y 3,3 años, respectivamente. Los científicos creen que AU Mic b se encontraba anteriormente más lejos de su estrella, pero la interacción gravitacional con el disco de gas o con otros planetas le hizo migrar más cerca.
Al igual que la estrella AU Mic, Beta Pictoris está rodeada por un disco y tiene la misma edad, pero pertenece al tipo A de estrellas por ser más grande y caliente. La comparación de sus sistemas solares ayudaría a los investigadores estudiar cómo se forman, evolucionan y migran los planetas.
La NASA presentó en un video animado con un modelo del sistema solar de AU Mic, que tiene una edad de 20 a 30 millones de años (150 veces más joven que nuestro Sol) y se encuentra a la distancia de 31,9 años luz de nuestro planeta.
EXPLICAN POR QUÉ LA CARA OCULTA DE LA LUNA NO TIENE MARES.
La asimetría entre ambos hemisferios del satélite natural de la Tierra ofrece pistas sobre el enigma de su formación.
Solo el 1 % del lado lejano de la Luna está cubierto de 'mares', mientras que la cara cercana abunda en estas manchas oscuras, en gran parte visibles a simple vista, que cubren casi la tercera parte de la superficie. La cara oculta, que solo conocemos gracias a los vuelos al espacio exterior y a varias misiones lunares en particular, es también mucho más pálida y tiene una composición diferente.
Décadas de exploración hicieron a los astrónomos relacionar esas regiones oscuras con flujos de basalto y atribuir su surgimiento a una especie de actividad volcánica. Sin embargo, su origen todavía era desconocido y solo un reciente modelado térmico de la Luna ha señalado la desintegración radiactiva de potasio, torio y uranio como una posible fuente de calor para fundir las rocas.
Un grupo internacional de científicos explicó este vínculo en un comunicado difundido el 22 de junio por el Instituto de Tecnología de Tokio. Su trabajo se enfocó en los elementos químicos distintivos de estas regiones oscuras con los basaltos en la superficie, que se sitúan casi todas en el lado visible de la Luna.
Los estudiosos se refieren a este grupo de elementos con el acrónimo KREEP, que significa, literalmente: potasio, elementos raros de la Tierra y fósforo. De toda la variedad de 'raros' destacan el uranio y el torio, detectados por medio de la espectrometría en concentraciones variadas en el lado cercano, mientras que en el reverso parecen casi ausentes.
Los investigadores recurrieron a una serie de experimentos para apreciar qué cambia la presencia de los KREEP en el suelo lunar. Mezclaron una composición sintética de estos elementos con los sustitutos de rocas lunares a distintas concentraciones (entre el 5 y el 50 %) y expusieron la mezcla a temperaturas comprendidas entre 1.175 y 1.300 grados centígrados durante varios días.
Uranio, torio y otros bajaron el punto de fusión del suelo y generaron hasta 13 veces más de la masa fundida en comparación con la que hubo en las muestras de control sin los KREEP. El modelo cuantitativo aplicado a estos datos demostró que las regiones oscuras podían ser fruto del calentamiento radiactivo de mezclas semejantes a las experimentales. En el lado oculto, este proceso tendría una escala muy reducida.
Indicio de colisión
El origen de las concentraciones elevadas de uranio, torio y otros elementos en cuestión se desconoce a ciencia cierta, pero la respuesta podría "ayudar a explicar las primeras etapas de la formación de la Luna y, a modo de consecuencia, las condiciones en la Tierra primitiva", estima Matthieu Laneuville, colaborador del Instituto de Tecnología de Tokio y coautor del estudio, publicado en Nature Geoscience.
La teoría que manejan los expertos supone que en la época temprana del Sistema Solar un cuerpo celeste del tamaño de Marte (que se llama convencionalmente Theia) impactó en el prototipo de la Tierra y generó una mezcla heterogénea de rocas en los dos cuerpos resultantes.
A falta de una erosión significativa, la Luna puede guardar en su superficie huellas de los eventos producidos en un evento planetario temprano como esa hipotética colisión. La zona rica en KREEP y con una topografía prominente puede ser una de esas huellas.
¿CÓMO ES UNA PUESTA DE SOL EN VENUS? LA NASA SIMULA ATARDECERES EN LOS DISTINTOS PLANETAS. (VIDEO).
Se trata de una herramienta digital diseñada para ayudar a los científicos comprender la composición química de la atmósfera de otros planetas.
Geronimo Villanueva, científico del Centro de Vuelo Espacial Goddard de la NASA, ha creado un video animado con simulaciones de puestas de sol en distintos planetas.
Las simulaciones, que fueron reveladas este lunes, forman parte de una herramienta digital diseñada por Villanueva que sirve para el modelado de posibles futuras misiones a Urano. Basándose en las mediciones de la luz recibidas de una sonda que descenderá a planeta, la herramienta ayudará a científicos comprender la composición química de su atmósfera.
Para comprobar la precisión de su programa, Villanueva hizo una simulación de los colores conocidos de la atmósfera de Urano y de otros planetas.
El resultado fue presentado en una paleta de llamativos colores con un video que muestra cómo se ve la puesta de sol mirando al cielo desde la Tierra (incluso en las condiciones de neblina o nubes), desde Venus, Marte, Urano, Titán y un planeta del sistema cercano Trappist-1e.
CIENTÍFICOS PUBLICAN UNA LISTA DE LUGARES EN EL ESPACIO PARA LA BÚSQUEDA DE POTENCIAL VIDA EXTRATERRESTRE.
Cientos de objetos astronómicos podrían convertirse en objetivos para la búsqueda de vida inteligente y nuevos estudios astrofísicos, según la iniciativa Breakthrough Listen.
El proyecto internacional de búsqueda de civilizaciones extraterrestres Breakthrough Listen ha publicado una lista de lugares de interés potencial para los astrónomos que buscan tecnomarcadores, indicios que apuntarían a la existencia de tecnología avanzada extraterrestre.
El nuevo catálogo incluye más de 700 diferentes objetos celestes, desde cometas, asteroides, galaxias y cúmulos estelares hasta fenómenos celestes más raros. Los científicos dividieron los objetos en cuatro categorías principales: prototipos (planetas y lunas, estrellas en cada momento de su ciclo de vida, galaxias, etc.), superlativos (objetos con propiedades más extremas), anomalías (objetos enigmáticos cuyo comportamiento actualmente no se explica) y muestras de referencia de fuentes que no se espera que arrojen resultados positivos.
El proyecto forma parte del programa de Búsqueda de Inteligencia Extraterrestre (SETI, por sus siglas en inglés). Breakthrough Listen ha ampliado significativamente sus capacidades desarrollando una tecnología de búsqueda con ayuda de radiotelescopios gigantes ubicados en tres continentes, que han permitido cubrir una gama de frecuencias sin precedentes y de alta resolución.
"Cuando se trata de la búsqueda de vida inteligente, es vital tener una mente abierta", señaló Pete Worden, director ejecutivo de Breakthrough Initiatives. "Hasta que entendamos más sobre las formas que podría tomar otra civilización y su tecnología, debemos investigar todos los objetivos plausibles. Su catalogación es el primer paso hacia ese objetivo", afirmó.
Sin embargo, hasta el momento los especialistas no han encontrado ningún rastro de tecnomarcadores pero, según explican, cientos de objetos astronómicos podrían convertirse en objetivos para la búsqueda de vida inteligente y nuevos estudios astrofísicos.
Breakthrough Listen invita a la población a ayudar a analizar estos datos en un intento de encontrar señales de civilizaciones extraterrestres.
"Muchos descubrimientos en astronomía no fueron planeados", comentó el autor principal del nuevo catálogo, Brian Lacki. "A veces, se perdieron nuevos descubrimientos importantes cuando nadie estaba buscando en el lugar correcto, porque creían que no se podía encontrar nada allí. Esto sucedió con los exoplanetas, que podrían haberse detectado antes de la década de 1990 si los astrónomos hubieran buscado sistemas solares muy diferentes al nuestro", agregó.
La iniciativa Breakthrough Listen es el proyecto más grande de rastreo de señales de civilizaciones extraterrestres que existe en el momento. Fue lanzado en verano de 2015 con apoyo del multimillonario ruso Yuri Mílner y el famoso científico británico Stephen Hawking.