HALLAN RESTOS DE ÁCAROS EN ÁMBAR DE LA ÉPOCA DE LOS PRIMEROS DINOSAURIOS.
Los dos ácaros microscópicos descubiertos en el ámbar fueron bautizados como Triasacarus fedelei, arriba, y Ampezzoa triassica, abajo.
Un equipo internacional de científicos descubrió los restos más antiguos de artrópodos conservados en ámbar hallados hasta el momento.
Los pequeños cadáveres fosilizados se remontan a la época de los primeros dinosaurios, señaló la revista "Proceedings" de la Academia Nacional de Ciencias de Estados Unidos.
Las muestras, parte de una mosca y dos ácaros completos, se encontraron al noroeste de Italia, y según los científicos son unos 100 millones de años más antiguos que cualquier otro artrópodo fosilizado en ámbar encontrado hasta ahora.
"El ámbar es una herramienta extremadamente valiosa para los paleontólogos porque preserva las muestras microscópicas con fidelidad, permitiendo estimaciones únicamente precisas del cambio evolutivo a través de millones de años", precisó el autor de la investigación, David Grimaldi, curador en el Museo de Historia Natural de EE.UU. en el departamento de Invertebrados.
Los ácaros recibieron los nombres científicos de Triasacarus fedelei y Ampezzoa triassica.
"GOTAS" MILENARIAS :
El ámbar se compone de glóbulos de resina fosilizada emitida por árboles que pueden remontarse hasta al Carbonífero, hace unos 340 millones de años. En ocasiones, insectos y otros animales pequeños son capturados por el pegajoso material y sus cuerpos permanecen encerrados en él durante millones de años.
Los paleontólogos calculan que los artrópodos tienen más de 400 millones de años sobre la Tierra. Con este descubrimiento se obtuvo una muestra que data de 230 millones de años atrás, en el Triásico, lo que permitirá conocer más detalles sobre su evolución.
Los restos de los pequeños organismos fueron encontrados entre más de 70.000 gotas minúsculas (de entre dos y seis milímetros de diámetro) extraídas de afloramientos en los Alpes Dolomitas, al noreste de Italia.
Al frente de las excavaciones se encontraban los científicos italianos Eugenio Ragazzi y Guido Roghi, de la Universidad de Padua, mientras que un equipo alemán de la Universidad Georg-August, de Gottingen, se encargó de analizar los restos animales y vegetales que contenían las gotas.
Los pequeños artrópodos fueron estudiados por Grimaldi y Evert Lindquist, científico canadiense experto en ácaros.
0 comentarios:
Publicar un comentario
Suscribirse a Enviar comentarios [Atom]
<< Inicio