YO SOY YUSUF, PADRE.
Soy Yusuf, Padre.
Mis hermanos no me quieren,
no me desean entre ellos, Padre.
Me agreden, me lanzan piedras e insultos.
Quieren que muera para hacerme un panegírico.
Me han cerrado la puerta de tu casa,
me han echado del campo,
han envenenado mis uvas
y han destrozado mis juguetes.
Cuando la brisa ha acariciado mi pelo al pasar,
me han envidiado y se han revuelto contra mí y contra tí.
¿Qué les he hecho yo, Padre?
Las mariposas se han posado sobre mis hombros,
las espigas se han inclinado hacia mí
y los pájaros han volado sobre mis manos.
¿Qué he hecho yo, Padre,
y por qué yo?
Tú me has llamado Yusuf
y ellos me han arrojado al pozo y han acusado al lobo.
Y el lobo es más clemente que mis hermanos, Padre.
¿Acaso he ofendido a alguien cuando he dicho que
he visto once astros, el sol y la luna, y que los he visto
prosternados ante mí?
POR : MAHMUD DARWISH.
Del Poemario : MENOS ROSAS (1986).
9 comentarios:
La envidia, hace cometer crímenes y pecar contra nuestros hermanos.
Bello texto.
Saludos
me acabas de hacer recordar una historia biblica
Jose hijo de Jackob que fue arrojado a un poso y luego vendido amercaderes egipcios ...
... al final interpreto el sueño de las 7 vacas flacas y las 7 gordas.
María Angélica
Me gustó el poema.
Los ancestrales odios matan, y nadie sabe el porqué.
Un abrazo.
Juan Antonio
También me recordó a algunos poemas que he leído en la biblia.
Triste poema, me ha trasmitido su angustia.
Besos, Amiga.
ULYSSES :
Lo que la envidia puede hacer a tus hermanos es terrible.
MOSARELLA :
Conocía esa interesante historia.
Saludos.
Tienes razón, JUAN.
MARYSOL :
A medidad que lo lees percibes la angustia del poeta.
Cariños.
Muy buen poema, aunque angustioso. Besos
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